Método no destructivo que permite reemplazar tuberías subterráneas que presenten daños o bloqueos totales por sarro o incrustaciones utilizando el mismo recorrido que la red antigua, insertando una nueva cañería de PEAD con posibilidad de mantener o aumentar su diámetro. La cuchilla de corte instalada en el cabezal utilizado es capaz de romper tuberías de los más variados materiales como hierro fundido, acero al carbono, asbesto cemento, vidrio, etc.

La implementación de este método se realiza de forma rápida y segura, minimizando amolestias a la población por la drástica reducción en la apertura de zanjas, además de reducir el riesgo de daños a tuberías adyacentes al utilizar el camino existente.

Con este sistema se puede incrementar la vida útil de la tubería, que puede superar los 50 añossiempre y cuando se utilice dentro de los límites de presión y temperatura del material.